"Velad y orad, para que no entréis en tentación;
el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil" (Mateo
26:41). Jesús mismo, que es nuestro ejemplo completo y perfecto (Juan
13:15), nos dio ejemplo en esto: "En aquellos días él fue al monte a orar,
y pasó la noche orando a Dios" (Lucas 6:12). Jesucristo oró antes de
escoger a sus discípulos, razón por la cual, vemos que otras de las razones por
las cuales debemos hacer vigilia, es para rogar al Señor a fin de que Él nos guíe
Sal 119:148 Se anticiparon mis ojos a las vigilias de la noche,
Para meditar en tus mandatos.